domingo, 17 de febrero de 2013

JÉREZ-ZALABÍ. ROMERÍA VIRGEN DE LA CABEZA


     Iniciamos con esta excursíón un conjunto de salidas que tienen por objeto recuperar el sendero tradicional que realizan anualmente los romeros de Jérez hasta la ermita del Zalabí, en Alcudia de Guadix. El sendero está vivo, como también lo está la romería que anualmente se realiza en Abril, y de la que realizaremos un reportaje en su fecha. No obstante éste tiene un interés que excede al de la propia romería, toda vez que en el camino confluyen una serie de elementos paisajísticos y unos yacimientos arqueológicos que nos proponemos explorar y poner en valor.
Domingo 3 de Febrero de 2013
Antonio Castillo al comienzo de la excursión


Ricardo Ruiz con el Picón al fondo










Olivos en espaldera en "los campos" de Jérez



   En una mañana soleada y fresca, tras saludar a nuestro amigo Manuel, propietario del hotel Picón de Jérez, y tomar un café calentito, salimos del cortijo Atanasio por la "cañá el Nabico", dispuestos a atravesar la vega de Jérez, llegar a "los campos" y bajar hasta el Zalabí. Ésta no es propiamente la vía que utilizan los romeros, pero transcurre casi paralela a ella, es una cañada real y nos interesa explorarla. El camino es ancho y llano, transcurre junto a la acequia de las viñas y riega la vega de Jérez. Actualmente algunos olivos se alternan con cultivos cerealísticos; en los años 60 esta vega refulgía de vigor con el cultivo de la remolacha, el trigo, la cebada, el maiz y las forrajeras. A nuestra espalda Sierra Nevada, al Oeste la minas de Santa Constanza, al Este las minas de Alquife y al Norte la torre de la iglesia de Albuñán se hace cada vez más ostensible. Pasamos junto a varios cortijos antiguos y  un abrevadero de ganado; el camino curva dos veces levemente a la derecha y el sonido de las campanas de Albuñán nos alegra la marcha con sus sonidos ancestrales. Llegamos a un cruce de caminos, los que llevan las acequias "del medio" y del "castañar", casi sin advertirlo ya estamos a la altura de Albuñán.
Balsa de Aute
El valle de Alcudia desde  el "puntal de los Moiseles"
La vega de Aute
Muro  de mampostería con hormigón  en el poblamiento de Aute

Emplazamiento de Aute

Ermita del Zalabí
 Los jerezanos denominan a estos bancales "los campos", aquí los riegos se van reduciendo conforme avanza el verano. La franja de tierras de cultivo se va estrechando hasta acabar en un espolón final, un gigantesco túmulo de tierras que son testigos de la conexión     de los dos barrancos, el Berral, por la derecha y el Bernal por la izquierda, estamos en el "coto de Molina" para los albuñaneros y en el "puntal de los Moiseles" para los jerezanos. Desde este punto de observación privilegiado observamos el inicio del valle de Alcudia y la feraz vega de Aute. Descendemos e investigamos los restos de la vega de Aute, su balsa, su acequia y los restos del poblamiento: dos muros de hormigón con numerosos restos de cerámica tardorromana y medieval. Soñamos un poco y nos imaginamos este asentamiento en época nazarí( modelo que está aún vivo en las montañas del Atlas marroquí), orientado al sol, más cálido que las frías alturas del altiplano, con su feraz vega y con nuestros antepasados andalusíes trabajando el regadío, los frutales y el ganado en una comunidad rural previa a la existencia de las alquerías del Sened y que posteriormente darían lugar a los actuales pueblos. Continuamos por una pista que a poco nos conduce al Zalabí, otro asentamiento de similares características, hoy destruido por la construcción de la ermita, aunque de ella hablaremos con motivo de la próxima excursión. La vuelta la hacemos hasta Jérez por el camino de los romeros.

Domingo 24 de Febrero


Ricardo, Manolo, Carlos y Lanteirano al comienzo del camino

El  Picón de Jérez


Los molinos de Albuñán
La balsa de Albuñán

El  camino ancho y recto

Curiosas caras en la torre de la iglesia de Albuñán

Captación del agua para la acequia de Aute

Acequia de Aute


Cortijo cuatro arrobas en el camino de los mineros

Balsa de Aute llenándose
En una nueva mañana fría y soleada pusimos en marcha la segunda de las salidas previstas para investigar el sendero de los romeros que marchan anualmente el último domingo de Abril desde Jérez al Zalabí. En esta ocasión seguimos en la ida el auténtico trayecto que realizan los romeros de la Hermandad de la Virgen de la Cabeza de Jérez. Salimos de Jérez a las 10,30 de la mañana por el antiguo "camino de Guadix" que tras pasar el cortijo de Manreso desciende hasta el barranco del Bernal, lo cruza, vuelve a subir y enfoca la  vega de Albuñán acompañando a la "acequia de Guadix" hasta entroncar con los molinos de este pueblo y muriendo en la antigua balsa de Albuñán.. El camino es recto y llano, la torre de Cogollos se enseñorea a nuestra izquierda y los almendros en flor animan con sus colores vistosos el refulgir del sol y el "nuevo vestido" de la sierra que queda a nuestra espalda. Al fondo ya vemos Albuñán que nos espera con sus calles entroncadas en torno a la calle Real, con su característica anchura y su aspecto de pueblo manchego. Tras comprobar la localización del museo etnológico local y tomar unos vasillos de exquisito  mosto que nos ofreció  un amable lugareño, pasamos el cementerio y descendemos por la trinchera que desciende por el badland hasta el Bernal. El río baja caudoloso y comprobamos como sus aguas las capta la acequia de Aute para acopiarlas en la balsa que se llena en estos momentos. Continuamos por el poblamiento de Aute hasta el Zalabí. La vuelta la hacemos explorando los cultivos que los albuñaneros tienen en el Bernal hasta que nos desviamos por la izquierda por el camino de los mineros hasta ascender al altiplano. Atravesamos los campos y vega de Jérez por el camino y acequia de Enmedio; son las 6.30 cuando llegamos a Jérez, la tarde es espléndida.
Cae la tarde, llegamos a Jérez